Menos mal que nos queda Portugal
He recordado en los últimos días aquel disco de
Siniestro Total, de hace casi tres décadas. La decisión del Tribunal
Constitucional portugués de invalidar el robo de la paga extra de funcionarios
y pensionistas me pareció un soplo de esperanza en este marasmo en que anda
sumida Europa.
“Que se lixe a troika”, dicen
muchos portugueses. ¡Qué se joda la troika!
De momento es ésta la que nos jode,
a españoles, portugueses y muchos más. La troika, esto es: la Comisión Europea,
el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Todos ellos
poderes sin ningún tipo de control democrático, y, ni qué decir tiene, sin
ningún tipo de representatividad de la ciudadanía. Estos poderes ilegítimos
imponen unas reglas de juego muy especiales para garantizar el auge de ciertos
negocios. ¿Quién puede creer en una Europa en que unos pagan el dinero a precio
de usura mientras otros lo obtienen gratis?
Solo hay una salida a esta
situación: no pagar la deuda. Ahí estamos unidos por un mismo objetivo, pero no
solo con nuestros vecinos portugueses; griegos, por supuesto, pero también
italianos, malteses, irlandeses, incluso franceses y algunos más…
Hace unos días lo decía el
prestigioso intelectual estadounidense Noam Chomsky, en declaraciones publicadas
por el diario griego To Vima: “es un buen momento para que los países del Sur hagan un frente común para
poner fin a las recetas neoliberales… las exigencias inhumanas del Norte”, y
hacía un llamamiento a los países del sur para hacer frente común contra la troika
capitalista.
Nos alarma ver cómo a algunos de
nuestros vecinos europeos piensan quitarles sus ahorros. Aquí mismo en nuestro
país, los afectados por las participaciones preferentes en banca seguramente
perderán su dinero. Pero muchos no tendremos la oportunidad de conseguir esos
ahorros porque ya nos llevan robando una gran parte del sueldo desde hace 3
años (hago aquí un inciso: si alguien está pensando tapar lo de las preferentes
robándonos un poco más a los de siempre que sepa que desde ya me estoy
acordando de toda su estirpe, para empezar; está claro que hablamos de un timo,
pero no hemos de olvidar que un elemento esencial en el desarrollo de un timo
es la predisposición del timado a sacar provecho de una situación, por el
contrario las víctimas del robo en nuestro sueldo estamos en estas sin “comerlo
ni beberlo”).
Cuántos años de desencuentros con
unos vecinos tan próximos, hoy más cercanos que nunca, compartiendo las
miserias que nos imponen los “bárbaros”.
Hoy, 25 de abril, se conmemora
aquella Revolución de los Claveles que en 1974 acabó con la dictadura
salazarista. Siempre les he envidiado por esto; nuestro dictador murió en la
cama. Sin embargo, hoy muchos herederos políticos de aquellos dictadores han
vuelto por sus fueros.
Leí en alguna ocasión la aspiración
de Saramago por una República Ibérica. Lo suscribo plenamente.
Lejos de las aspiraciones burguesas
de muchos vascos y catalanes, incluso algún otro, yo quiero apostar por una
República Ibérica, dentro de una federación europea estructurada
democráticamente, en la que se superen de una vez por todas las actuales
instituciones títeres que solo representan los intereses de los poderosos.
Hoy quiero cantar bien alto, con
nuestros vecinos, aquel himno que inesperadamente compuso el gran José “Zeca”
Afonso:
“Grândola, vila morena: Terra da fraternidade…”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario